EL FESTIVAL DE SEVILLA, UNA CITA INELUDIBLE EN EL CALENDARIO CINEMATOGRÁFICO
ALBERTO ÚBEDA-PORTUGUÉS. 1 de noviembre de 2010
El Festival de Cine Europeo de Sevilla abre sus puertas este próximo fin de semana (del 5 al 13 de noviembre), consolidado como una cita de gran cine continental (donde se dan a conocer, el 6 de noviembre, las nominaciones del año a la premios de Academia de Cine de Europa) y con importantes ciclos y homenajes (en esta edición al documentalista pionero holandés Joris Ivens), además de una muy sabrosa sección oficial, con obras recientes de la cinematografía europea que cabalgan entre el cine de autor y el comercial, aunque sin alejarse mucho de la primera etiqueta.
En esta sección oficial, Susanne Bier, la gran cineasta danesa de films como "Después de la boda" (2008), presenta "En un mundo mejor". La escritora francesa Yasmina Reza (autora de la pieza teatral de gran éxito "Un dios salvaje") llega con su ópera prima, "Chicas", que protagoniza Carmen Maura. También estará en esta sección oficial el film griego "Black Field", debut de Vardis Marinakis, del que cuentan que es una gran obra.
Carlos Saura presentará en una gala especial "Flamenco, Flamenco" (estreno el 19 de noviembre), un homenaje emocionante al mundo y a los artistas del flamenco. Se proyectarán algunos de los films candidatos a los Premios del Cine Europeo, como "El secreto de sus ojos de Juan José Campanella; "Celda 211", de Daniel Monzón, o "Tamara Drewe", de Stephen Frears (estreno 12 de de noviembre). Frears recibirá un Premio de Honor por el conjunto de su carrera, así como el español Vicente Aranda. Pero hay muchas más secciones y sorpresas.
Son ya siete años los que ha andado el festival de Sevilla y hay que decir que el staff directivo (en las cinco primeras ediciones la cabeza visible del certamen fue Manuel Grosso y actualmente es Javier Martín Domínguez) han hecho hasta el momento las cosas muy bien. Cobijados en una ciudad mítica en el entorno europeo y mundial, la organización del certamen ha sabido ir captando la atención de las productoras, distribuidoras y autores europeos y, cada vez más, de los mejores intérpretes, no olvidando que en Sevilla hay mucho espacio para el glamour. Lo mejor de todo es que el certamen, pese a estos tiempos de crisis permanente, tiene muchas posibilidades de seguir creciendo y llegar a ser, lo es ya, una cita ineludible en el calendario cinematográfico.
Chapeau a un equipo directivo y a las instituciones que lo han apoyado y han fijado el certamen en un marco europeo y asentado el evento con la armonía de un guante a la mano en una ciudad llena de grandeza y leyenda.
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