'DÉJAME ENTRAR', UN REMAKE AMERICANO DE UNA HISTORIA DE AMOR INICIÁTICO Y SANGRE

ALBERTO ÚBEDA-PORTUGUÉS. 22 de octubre de 2010

"Déjame entrar" (Let Me In) es el rápido remake realizado de la película sueca de igual título que hace dos años causó sensación en el festival de Sitges y en su estreno comercial a nivel de cine independiente en todo el mundo. Contaba la historia de un chaval de los suburbios de Estocolmo que era maltratado por sus compañeros de clase y que, de pronto, tiene una inesperada ayuda de una compañera extraña que parece estar siempre en todas partes. Las ofensas y golpes que recibe el chaval son vengados brutalmente por la niña, que en realidad necesita físicamente esa venganza porque es una vampira y su supervivencia depende de la sangre que beba. El film funcionaba muy bien como historia iniciática sobre la difícil etapa del paso a la niñez a la adolescencia y creaba una atmósfera peculiar y amenazante de los barrios más desfavorecidos por la rueda de la fortuna capitalista.
Con igual título, "Déjame entrar" se ha convertido en un film anglo-americano (con el que la legendaria productora británica Hammer vuelve a la producción de films -ver http://pocodecine.blogspot.com/search/label/biofilmograf%C3%ADa) dirigido por Matt Reeves (cineasta estadounidense que causó sensación con "Monstruoso"; Cloverfield, 2008), el cual ha ambientado su remake en Nuevo México en la misma época en que transcurría el film sueco (que, por otra parte, se basaba en la novela del también sueco John Ajvide Lindqvist, publicada en 2004): los años 80. Unos años, ¿de qué nos sonará?, azotados por la crisis económica y por el conservadurismo político; entonces, en Norteamérica -y por extensión en todo el mundo-, en la era Reagan, de infausto recuerdo.
"Déjame entrar", de Matt Reeves, ha tenido buenas críticas allá donde se ha presentado. También ha participado, como su antecedente, en el festival de Sitges y va a tener el aliciente de que en estos dos años desde el estreno del film nórdico ha impactado internacionalmente el fenómeno de los vampiros juveniles con la saga "Crepúsculo". Bien es verdad que "Déjame entrar" apuesta mucho más por el cine sociopolítico mientras que los guapos vampiros de "Crepúsculo" son una fantasía romántica adolescente.
En cualquier caso, bienvenido sea este film de terror y amor que nos recuerda dramáticamente esa indefensión que muchos sufrimos durante la edad del pavo, cuando el mundo nos asustaba y éramos en todos los sentidos todavía menos que ahora.
FICHA TÉCNICA Y ARTÍSTICA
Título original: "Let Me In". Dirección y guión: Matt Reeves. Basado en la novela de John Ajvide Lindqvist, basado en el film homónimo de Tomas Alfredson. Director de fotografía: Greig Fraser. Montaje: Stan Salfas. Música: Michael Giacchino. Intérpretes: Chloë Grace Moretz (Abby), Kodi Smit-McPhee (Owen), Richard Jenkins (El padre), Elias Koteas (El policía). Producción: Hammer Films, Overture Films. Color, 1: 2,35. Duración: 116 min. Nacionalidad: Reino Unido-EE UU. V.O. en inglés. Premios: Sección oficial 'Fantàstic Galas', Festival de Sitges, 2010. Distribuidora: Aurum. Estreno: 22 de octubre de 2010.


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